Eulate + Ayesta. Una experiencia en arte y vida
“La exposición responde al deber emocional que siento hacia Xavier Álvarez de Eulate. Quiero brindar a mi amigo y mentor un pequeño y bello homenaje”, afirma el pintor Juan Ayesta. El vínculo personal y artístico entre Juan Ayesta y Xavier Álvarez de Eulate se inicio y se desarrolló en el convento franciscano de Olite. Precisamente fue allí donde, entre 1977 y 1982, coincidieron todos los veranos. Ambos se conocieron y admiraron bajo ese contexto. “Las obras seleccionadas para confeccionar la muestra son el reflejo de ese nexo especial. Xavier Álvarez de Eulate, mi mentor, y yo, somos dos personas que se encuentran en un espacio–tiempo y consolidan una relación artística y humana inédita, que concluye en un vínculo de amistad en arte y vida. La época que compartí junto a Álvarez de Eulate fue clave en mi desarrollo pictórico. Su impronta fue notable. Gracias a ella coseché varios reconocimientos y pude despuntar entre los jóvenes pintores guipuzcoanos”.